Vilnius

Vilnius

miércoles, 27 de octubre de 2010

Visita

Llevo mucho sin contaros nada porque ha venido Bea de visita aprovechando las vacaciones de Autumn Break que hacen en Dinamarca a mediados de octubre. Como ha estado bastantes días hemos visitado Vilnius y también hemos aprovechado para hacer un pequeño tour por los países Bálticos o, como los llama ella, "mis países".


PRIMERA ETAPA: VILNIUS

Estuvimos visitando toda la ciudad: el centro, la catedral, Uzupis, el castillo Gediminos... incluso nos dio tiempo a hacer algo de compras, así aproveché y conocí el centro comercial más grande de la ciudad. Es un complejo enorme en las afueras de la ciudad. Las tiendas son como cualquier otro centro comercial, aunque las que más se prodigan son sin duda las zapaterías. Yo aproveché y me compré unas deportivas por sólo 20 eurillos porque las mías están dando sus últimos coletazos de vida.



Yo ya había probado la comida típica lituana: los Cepelinai o Zeppelines, que son patatas rellenas de carne. Hay dos versiones: fritas o hervidas. La que más rica está es lógicamente frita. Lo mejor de todo fue que no encontrábamos ningún sitio donde comerlos (a mí me llevó mi mentora y yo no recordaba el sitio), así que le preguntamos a una pareja de más o menos nuestra edad que dónde podríamos encontrarlos. Ni cortos ni perezosos se pusieron a andar y nos dijeron que era muy difícil explicárnoslo y que tampoco lo tenían muy claro, así que nos guiarían. Estuvieron andando con nosotros un cuarto de hora o incluso más tiempo, nos dijeron dónde había un mercadillo, nos estuvieron contando cosas de Lituania (como que cuando hay -20ºC los niños tienen permitido no ir al colegio, y que a -25ºC todos los estudiantes pueden quedarse en casa) y nos llevaron hasta la puerta de un restaurante genial. Se portaron de diez.

Mucha gente aquí es así de atenta y amable. Además por lo general nos tienen bastante aprecio a los españoles, aunque se sorprenden cuando ven que nuestro nivel de inglés es mejor que "Hello" y "Party". Nuestra fama nos precede. Es curioso cómo se me ha desmontado totalmente la idea de la gente fría de los países bálticos: son mucho más cercanos con la gente desconocida que en España.

Otra curiosidad nos la encontramos simplemente paseando, os dejo con la foto:


SEGUNDA ETAPA: TRAKAI



Trakai es una pequeña ciudad que está 28 Km al oeste de Vilnius. Se tarda sólo media hora en tren. Fuimos a pasar el día y, aunque hacía frío, nos hizo un día precioso. El Parque Nacional Histórico de Trakai fue fundado el 23 de abril de 1991 para preservar Trakai como centro acondicionado del Estado lituano, así como su auténtica naturaleza. Es el único parque nacional histórico no sólo en Lituania, sino también en toda Europa. Lo más característico es su castillo, rodeado por un lago.


En Trakai me compré también el maravilloso gorro de ruso que veréis en alguna foto más adelante. Me encanta, es lo más calentito que se ha inventado.

A lo largo del camino encuentras muchos muelles con algún barquito incluso. Las vistas y la naturaleza son preciosas.



 Al irnos vimos una puesta de sol preciosa. Aunque la cámara de fotos de Bea estaba sin batería conseguimos hacer alguna foto.


TERCERA PARADA: KLAIPEDA

 Klaipeda es el único puerto de mar importante de Lituania en el Báltico. Desde allí salen ferries a Suecia, Dinamarca y Alemania. Es una ciudad pequeña y de casas bajas y muy bonitas.


Al ir a Klaipeda tuvimos una pequeña aventura: fuimos con las maletas y estaba lloviendo, por lo que calculamos mal el tiempo de trayecto hasta la estación de trenes.

Llegamos 6 minutos antes de que saliese nuestro tren, sudando y tras mucho correr. Me acerqué a la taquilla mientras Bea esperaba con las maletas en las escaleras que iban a los andenes y pedí 2 billetes (en lituano, porque las taquilleras del tren no saben lo que es el inglés).

Cuando me fueron a cobrar saqué la tarjeta de crédito y la taquillera me indicó que tenía que ir a la taquilla de al lado. Al ir a atenderme me dijeron que ya faltaban menos de 5 minutos para que saliera el tren y no podía pagar con tarjeta (todo esto mitad lituano mitad signos... no sé ni cómo nos entendimos). Saqué dinero en efectivo y me sacaron corriendo el billete. Llegamos al tren justo cuando estaba a punto de salir pero pudimos subirnos.

Con las prisas no había comprobado el billete... sólo me habían dado uno. La revisora nos dijo que podíamos comprarlo en el tren, pero no podía ser con tarjeta de crédito y no teníamos Litas en efectivo. De nuevo mitad lituano, mitad inglés, mitad gestos... ofrecimos pagar en euros. Tras un rato aceptó: 16€. Sacamos el dinero y sólo teníamos 13... el tren estaba ya en marcha, nosotros sudando la gota gorda por el carrerón, las maletas y nuestra ropa empapada...

Tras seguir intentando arreglar las cosas con el enorme hándicap del idioma llegamos a un acuerdo: ellos se quedarían nuestros euros, al llegar a Kláipeda yo bajaría del tren, sacaría dinero y pagaríamos el billete restante, y ellos entonces nos devolverían los euros. Así lo hicimos.

Hay un parque con muchísimas esculturas. Es precioso el entorno entre tanta naturaleza.


Klaipeda nos sirvió de puente a nuestra siguiente parada: Nida

CUARTA PARADA: NIDA

Con diferencia el sitio que más me ha gustado de este minitour que hemos hecho. El municipio de Neringa y su capital Nida son zonas costeras con una amplia zona de playas, situadas en una pequeña franja de terreno que, a su mitad, ya forma parte del enclave ruso de Kaliningrado.

Madrugamos para coger el ferry que nos llevaba a la pequeña "manga" en la que está Nida. El ferry tarda 3 minutos en cruzar el estrecho. Allí cogimos un autobús que en 1 hora nos llevó hasta Nida.

Nada más llegar nos encontramos un amanecer precioso en el puerto.



Tras desayunar nos fuimos a visitar la duna más grande de Europa, de 60 metros de altura. Las vistas desde allí son impresionantes. Pudimos subir a lo más alto e incluso caminar por la duna.



Después de visitar la duna nos fuimos andando una media hora a través del bosque para llegar al lado de Nida que da al Mar Báltico. Todas las playas de Nida tienen la bandera azul de calidad europea. La arena es blanca y fina, el agua está limpísima y el paisaje es asombroso.




Tras esto, una última vuelta por la ciudad y vuelta a Klaipeda.


QUINTA Y ÚLTIMA ETAPA: RIGA

Riga es la capital de Letonia. Desde Klaipeda tardamos 4 horas en autobús. Hicimos una ruta de visita que nos recomendaron en la oficina de turismo para ver todo lo importante en un día. Lo bueno de Riga para visitar es que todo está cerquísima entre sí, lo que evita perder el tiempo en traslados.
Es una ciudad maravillosa y tiene un toque incluso mágico. Tener la posibilidad de ver tantos edificios bonitos juntos es increíble.


Incluso nos hicimos una foto con los trotamúsicos de Bremen


Y por la tarde tuvimos de nuevo la oportunidad de ver una puesta de sol sobrecogedora desde la orilla del río. Os recomiendo que pinchéis en las imágenes para verlas en grande porque realmente merecen la pena.



Y ese ha sido nuestro tour, que nos ha encantado.

Intentaré contaros más cosas pronto.

Besos y abrazos.
Jaime.

martes, 12 de octubre de 2010

Claustrofobia

El viernes Miguel y Ricardo se quedaron encerrados dentro de su habitación. Su cerradura estaba muy desgastada y alguna pieza falló, por lo que la manivela estaba totalmente fija y no podían hacer el juego necesario para abrir la puerta.

Avisamos al chico de recepción, que subió con un destornillador. Quitó la manivela pero no se podía hacer nada, la puerta seguía atascada.



Su respuesta: no puedo hacer nada. Le preguntamos que qué hacíamos, que si le dábamos de patadas a la puerta hasta tirarla o qué. Sorprendentemente, su repuesta fue que sí, que tirásemos la puerta a patadas, porque hasta el lunes nadie iba a venir a hacer nada (otra muestra del cariño que nos tienen en Sauletekio 39-A).

Entonces entró en escena Panayot para demostrar su pericia como karateka. De unas cuantas patadas reventó la puerta (es bastante gruesa, unos dos dedos).



Tras tanta patada se rompió la puerta, pero por suerte no la cerradura, así que la puerta podía abrirse y cerrarse con la llave, y así ha estado todo el fin de semana hasta que el lunes han venido a arreglar la puerta.

Besos y abrazos.
Jaime.

lunes, 11 de octubre de 2010

La Universidad

Llevo una semana sin actualizar por varias razones. La primera es que no he parado de hacer cosas y la segunda es que este fin de semana no teníamos acceso a Internet en la Residencia. Era tan sencillo como reiniciar el router, pero sólo el administrador tiene la llave necesaria y claro, hasta hoy nada de nada (así funcionan las cosas aquí).

Empiezo a tener mucho trabajo en la Universidad: exámenes, prácticas, trabajos... y de momento voy bien a costa de trabajar bastante.

Como ya os dije, el camino a la Universidad desde la Residencia es increíble. Todo entre árboles y una vegetación muy tupida. Ahora empieza a hacer frío (en torno a 9ºC durante el día y en torno a 0ºC por la noche), aśi que cuando empiece a nevar prometo poneros fotos del camino cubierto de nieve.



Este es uno de los caminitos que os dije que se van uniendo al camino principal. La carretera principal que lleva al centro está detrás de esos árboles a tan solo unos metros, pero la vegetación es tan espesa que apenas se ve.



Tras cinco minutos andando (mi edificio es el último de todos, por tanto el que más lejos está de la Universidad) llegamos al edificio principal. Hay tres edificios, pero están unidos y conectados internamente.



Os voy a contar qué asignaturas tengo:

  • English I: poco que decir. Es inglés para ingenieros de Obras Públicas. La profesora no quería admitirme en su clase porque soy estudiante de otra facultad, pero tras explicarle mil veces que para mí es una asignatura de Libre Elección y que quería cursarla, me dejó quedarme. Hoy he tenido mi primer examen, justo de esta asignatura, y ha ido bastante bien. Era un examen oral en el que teníamos que hablar durante 3 minutos sobre nuestra Universidad. Más adelante tendremos otro examen sobre gramática, otro más sobre vocabulario y un último examen sobre una lectura.

  • Information Technologies I: esta asignatura trata sobre programas ofimáticos (word, excel...). Me parecía más sencilla de lo que en realidad es. Cada semana tenemos que entregar tareas sobre un programa en concreto y si aprobamos todas podemos presentarnos al examen final. Lo malo es que el profesor es muy mayor y habla muy muy bajito y con un acento muy raro, por lo que me resulta dificilísimo entenderle.

  • Man and Environment: esta asignatura es del estilo de Conocimiento del Medio. Vemos las capas de la Tierra, el ciclo alimenticio, etc. Tenemos dos exámenes parciales y, si los aprobamos, no tenemos que ir al examen final.

  • Modern Communication Systems: esta asignatura es la única propia de mi carrera que estoy cursando aquí. La voy a convalidar por Sistemas de Comunicaciones Móviles. Vemos cosas como modulación en frecuencia y similares. Tenemos que hacer una presentación (yo la tengo el día 26 y es sobre RDSI) y un examen final en enero.

  • Marketing: esta asignatura es muy interesante, lo malo es que tenemos que hacer un trabajo bastante grande. En mi grupo somos tres: Mert (el chico turco que ya conocéis), Ayshe (una vecina también turca) y yo. Lo bueno es que trabajando con ellos voy a hablar muchísimo inglés.

  • Lithuanian Language Course for foreigners: pues un curso de Lituano para extranjeros. De momento sólo hemos tenido una clase, así que no sé mucho.

Por cierto: aquí también hay novatadas, como en España. Para muestra: un botón.



De momento eso es todo (que no es poco). Esta semana he hecho bastantes cosas, así que ya os iré contando.

Mañana vamos a la embajada española a una recepción por motivo del día de la Hispanidad, a ver si os cuento algo interesante.

Besos y abrazos.
Jaime.

lunes, 4 de octubre de 2010

Kaunas

Este fin de semana hemos ido de visita a Kaunas, la segunda ciudad más importante en Lituania. La verdad es que sólo la conocía por el Zalgiris (equipo de baloncesto) y no hay gran cosa que ver, pero la diversión estaba asegurada.

Ha sido todo un poco improvisado, porque había otro viaje preparado que iba a durar dos días y al que yo no podía ir porque mañana tengo mi primer examen en Lituania (deseadme suerte). Sin embargo, al final ese viaje no llegó a buen puerto y la mañana del sábado Dani me despertó diciéndome: vístete, nos vamos a Kaunas y volvemos mañana.

Tras despertarme me fui a preguntar cuál era el plan: ir a visitar Kaunas, reunirnos con Mert que ya estaba allí, dormir una noche y volver el domingo por la tarde.



Me di una ducha, preparé la mochila y pusimos rumbo a Kaunas. ¿Que cómo fuimos? En tren. Nos costó 7.50 Lt el billete (unos 2€).



El tren aquí es bastante curioso: vas viendo unos paisajes alucinantes, pero también unas poblaciones paupérrimas. No sé cómo será aquí la gente para que tengan que poner este tipo de carteles dentro del tren...



El tren tardó una hora y media, y llegamos a Kaunas a eso de las 16:15. Dimos una vuelta por un pequeño mercadillo que ya estaba cerrando (una pena, tenía buena pinta) y fuimos hacia el centro de la ciudad.



A las 17 hicimos parada técnica para comer. No importa comer tan tarde porque en los restaurantes te sirven sin problema, hay gente que a las 5 de la tarde ya empieza a cenar, así que todo estaba abierto. Si quieres comer más tarde tienes miles de restaurantes de comida rápida (pizza, hamburguesas, kebab...).

Después de comer llegamos al albergue. Tras buscarlo durante un rato y acabar metidos en un callejón que daba miedo incluso a plena luz del día, Jose y Albert lo encontraron. Como habéis supuesto, estaba dentro del callejón.

Sin embargo, creo que ha sido la mayor alegría del viaje. El albergue estaba completamente nuevo (lo habían inaugurado el día anterior), limpio y acogedor. Pedimos una habitación para cinco. El precio: 31 Lt por persona (algo menos de 9€).





El albergue lo llevaban una chica (Hele) y un chico (Víctor). Ella es de Estonia, y él lituano y de Vilnius. Los chicos son majísimos: nos dijeron dónde estaban los pubs por allí, los mejores sitios para ir con conciertos en directo (aunque resulta que el sábado es el único día de la semana que no hay conciertos en directo) e incluso se vinieron con nosotros por la noche.

Nos dijeron que teníamos que pintar nuestra bandera en la pared porque éramos los primeros españoles en llegar allí, así que Jose con el dedo y yo con el pincel, nos pusimos manos a la obra.




El domingo nos levantamos tarde y nos fuimos a recorrer la ciudad. La verdad es que no tiene mucho que ver... creo que lo que más nos ha gustado ha sido el mercadillo que hemos encontrado con una cantidad de cosas... pins, cromos de baloncesto del año 95, cascos de las SS, máquinas de fotos antiguas... muy interesante.

Esta es una de las principales iglesias de Kaunas. Creo que es ortodoxa.



También entramos en una iglesia muy extraña: por dentro es blanquísima y muy luminosa, y había hilo musical con música clásica. Esta iglesia es cristiana, así que he intentado ir explicándole a Mert (que es turco) lo que íbamos viendo, como por ejemplo lo que era la pila bautismal.



En esta iglesia se podía subir a la azotea. Las vistas desde allí son impresionante.



Hemos vuelto a Vilnius por la tarde-noche y el fin de semana desgraciadamente no ha dado más de sí. Os dejo con alguna foto más de la ciudad.





Esta última foto me encanta. Os dejo también con la nota divertida del viaje a cargo de Mert.




Besos y abrazos.
Jaime.